Las metas de proceso y el rendimiento deportivo
Siempre que doy una clase o comparto conocimientos con personas surge el debate de la importancia que tienen las metas de proceso y el rendimiento deportivo.
Algunas personas piensan que no es necesario plantearse objetivos o metas y que la vida o la competición nos marcará el lugar que ocuparemos. Personalmente pienso que aunque las metas de resultado son únicamente una guía, el día a día y las metas de proceso son básicas para el crecimiento y el cambio.
Otra frase muy repetida en la sociedad y en el deporte es: ¡Es imposible cambiar! Y más que imposible o difícil creo que no se tienen las herramientas o procedimientos claros para el cambio.
Cuando se inicia el nuevo año un porcentaje alto de gente se establece propósitos que abandona en las primeras semanas. Pero el cambio no tiene por qué ser doloroso o difícil.
Existen muchos métodos y formulas, pero voy a centrarme en un método llamado “kaizen” que se resume en una afirmación del Gran libro de tao que dice: “Un viaje de mil millas comienza con un pequeño paso”. Qué significa esto: que si quieres conseguir un objetivo muy ambicioso o muy complicado no hay que centrarse en él, sino en el primer paso para avanzar. Utilizar pasos muy pequeños para mejorar hábitos, procesos u objetivos es la mejor forma de conseguirlos.
Está muy de moda en el deporte la frase: “Hay que ir partido a partido”. Y precisamente nos habla de esta situación. Si quiero ganar un campeonato no puedo pensar en la última semana del torneo. Me tengo que centrar en el presente: el partido de hoy, el entrenamiento de hoy. Si ahí soy el mejor, estoy en el proceso de conseguir mi objetivo final y avanzando hacia él.
Otro ejemplo: si me dicen que tengo que escribir un libro para dentro de 5 meses probablemente me estresaría y no vería la forma de hacer. Aplicando este método la percepción varía ostensiblemente. Si en 5 meses hay 152 días más o menos, ¿es posible escribir medio folio al día? No estoy hablando de más. Únicamente tienes que dedicar 20 ó 30 minutos al día. Yo creo que con esta visión y una dosis de voluntad y decisión el objetivo es muy alcanzable.
Como decía el mítico entrenador de baloncesto de la Universidad UCLA John Wooden: “Cuando mejoras un poco cada día, al final ocurren grandes cosas. Cuando mejoras tu forma física un poco cada día, al final se produce una gran mejora en tu forma física. No mañana, ni al día siguiente, pero al final has hecho un notable progreso. No hay que buscar mejoras rápidas y espectaculares, sino mejoras pequeñas día a día, Esa es la única forma en que ocurren, y cuando lo hacen permanecen”.