Se acerca el verano y con él las merecidas vacaciones. Hay personas que están todo el año trabajando, para disfrutar de unas semanas de descanso, otras que tienen incluso más tiempo y otras que apenas tendrán unos días.
Sea como fuere, es importante que las aprovechemos y disfrutemos. Tanto en el día a día como en el tiempo de descanso es importante que tengamos claro qué es lo que queremos hacer y establecer de forma global una planificación. Parece una tontería, pero si te sientas con tu familia o amigos un rato y estableces dónde quieres ir y lo que te apetece hacer, las merecidas vacaciones se aprovecharán y disfrutarán mucho más.
El año pasado recuerdo como me levantaba en la playa todos los días muy pronto para ver el amanecer y pasear. Mi hija mayor me pidió un día que la levantase para venir conmigo y le gustó tanto que me acompañó el resto de los días. Al cabo de los meses, le pregunté qué fue lo que más le gustó de las vacaciones y me dijo que levantarse pronto conmigo para ir a pasear.
Esto me hizo reflexionar. Habíamos estado en un buen hotel, con muchas actividades para los niños, hicieron un curso de windsurf, … y lo que más le gustó fue simplemente pasear con su padre.
En muchas ocasiones creemos que lo material va a hacer significativo el verano, pero lo realmente importante son las personas. Con las personas con las que lo compartas es lo que va a determinar cómo te lo vas a pasar en estas vacaciones.
Aunque seas un deportista de éxito y te hagas fotos asombrosas en Instagram rodeado de lujos, si no estás con las personas que quieres, estoy seguro que no lo disfrutarás, ni lo recordarás como unas buenas vacaciones. La gente creerá que has tenido unas grandiosas vacaciones, pero tú sabes que lo único que has tenido es lujo y postureo.
Tanto si eres un deportista profesional como si eres un estudiante, recuerda que lo realmente importante de las vacaciones son las personas con las que vas a compartir ese tiempo. Si además aprovechas el tiempo, descansando, caminando, leyendo, haciendo deporte, relajándote y comiendo en familia y con tus amigos, recordarás estas merecidas vacaciones con mucho cariño.
Disfruta, vive el presente cada día y recuerda que luego vendrá otro ciclo donde tengas que empezar a trabajar. Si este periodo de trabajo lo disfrutas tanto como tus vacaciones indicará que vas por un buen camino.