Suerte o trabajo

 

Cuando alguien consigue algo en la vida o en el deporte, en ocasiones se achaca a la suerte. Pero, ¿es suerte o trabajo ?

El expresidente de los Estados Unidos Thomas Jefferson, dijo: “Yo creo bastante en la suerte. Y he constatado que, cuanto más duro trabajo, más suerte tengo”.

Estoy de acuerdo con Jefferson en que más que suerte la gente que consigue algo ha hecho una serie de cosas para obtenerlo. En ocasiones puede haber algún componente de azar, pero está claro que si no hay esfuerzo detrás será imposible. Otra cosa es que la gente de fuera no vea todo lo que el deportista o la persona se han esforzado para conseguirlo y pueda decir que ha tenido fortuna.

Por tanto, más que casualidad es causalidad. ¿Es casualidad que un equipo meta la canasta final en el último segundo o que un equipo de fútbol remonte el partido en los minutos de descuento? Yo creo que tiene más que ver con trabajar, con creer, con darlo todo, que con la fortuna.

Hay un principio en la naturaleza que lleva a deducir la causa por sus efectos, incluso aunque esa causa no sea visible.

Si un pájaro cae abatido por un disparo, suponemos que un cazador fue el autor, aunque no lo hayamos visto. Por tanto, no es necesario ver las cosas para saber que han ocurrido o existen, ya que observando los efectos se llega a conocer las causas.

En muchas ocasiones he visto como la gente comentaba la suerte que había tenido tal deportista en llegar a la élite y el dinero ganaba. Pero nadie conoce posiblemente todos los esfuerzos, sacrificios, días de entrenamiento, concentraciones, partidos o competiciones fuera de su ciudad o país que ha tenido que llevar a cabo hasta llegar ahí. O todas las cosas que no ha podido hacer por cumplir su sueño como no salir de fiesta con los amigos, tener que cuidarse la alimentación y el descanso, no poderse ir de vacaciones con su familia, hacer un esfuerzo extra para estudiar después de horas y horas de entrenamiento, etc.

Si se viese todo lo que hay detrás de estos deportistas o estas personas que consiguen sus objetivos probablemente no diríamos que es suerte sino trabajo. ¿Puede haber un componente mínimo de azar? Pues es posible. Pero el 99% restante es gracias al trabajo, talento y mentalidad del deportista o la persona.